Tengo que confesar un secreto, ¡de pequeña odiaba las lentejas!
Siempre ha sido una legumbre que no me gustaba nada, recuerdo llegar del colegio y encontrarme el plato en la mesa… sólo el olor del guiso me revolvía las entrañas, ¡qué manía les tenía!
Mi madre repitiéndonos la cantinela «lentejas, si quieres las comes y si no las dejas» o «lentejas para las viejas» y nosotros rezongando, pidiendo otra comida para ese día, pero nunca teníamos escapatoria, había que comerlas sí o sí, enmascaradas con litros de vinagre, llenas de trozos de queso o con pedacitos de pan flotando en el plato para intentar que pasaran sin ni siquiera saborearlas, sólo deseando que se acabase aquel mejunje interminable.
Mi madre las hacía viudas (sólo con verduras) o con acompañamiento cárnico normalmente suavecito: pollo, jamón o algún trozo de panceta fresca. En casa nunca hemos sido de guisos pesados cargados de chorizo, tocino a discreción o morcilla, la textura grasa en los caldos no nos entraba demasiado bien.
Y hace unos días mi chico me dijo que quería comer lentejas, así que cedí, las tomamos poco y casi siempre en ensalada, pero él las quería guisadas y con su compango, era el momento de ponerse manos a la obra…
Éstas están cocinadas en olla lenta, todo un invento, la compré en la tienda Casa porque sacaron una oferta muy maja y me costó bien poco, la suelo usar para cocer pulpo, hacer cocido, caldo de huesos, carnes y algún otro guiso de legumbres, y he de decir que las lentejas han quedado también deliciosas (sí, ahora me las como sin rechistar, como muchos otros alimentos que antes no me gustaban y ahora son básicos en mi cocina. Es lo que tiene hacerse mayor y aprender a apreciar los sabores ^_^).
Se nota la cocción lenta, a fuego bajo, no hay nada como darle tiempo a los guisos. Y es que en la sociedad de las prisas volver a la lentitud es un regalo, aprovechémoslo hasta cocinando.
Os dejo la receta por aquí, por si también tenéis una ollita de éstas por la cocina y queréis seguir sacándole rendimiento, aunque en la cacerola (o incluso en olla exprés) también quedarán deliciosas, como todo lo que se cocina en casa con ingredientes ricos y con amor =) Sigue leyendo…